Donde el río fue frontera: escarpes y barcas de paso por El Castellar y La Atalaya (14,2 km)
Las casetas-palafito del paraje de La Codera, construidas en la llanura de inundación, están elevadas sobre pilares para evitar ser dañadas por las crecidas.
El Ebro en esta etapa sigue siendo un río de contrastes. Mientras en la margen derecha dominan los frondosos sotos, en la izquierda encontrarás verticales paredones de yesos y un paisaje estepario.
Dejando atrás los manantiales en las terrazas de “La Bomba” se llega a uno de los más espectaculares escarpes del río: La Peña Palomera. Nada más pasar este escarpe, puedes desembarcar y adentrarte en un paisaje muy singular: Sal, estepa e historia envuelven los restos arqueológicos del Barranco de la Virgen, en el entorno del antiguo castillo y poblado cristiano del Castellar.
Seguiremos disfrutando del patrimonio histórico: Los embarcaderos de Torres y Sobradiel se ubican en los pasos de sendas barcas de paso tradicionales. Un final perfecto para esta jornada es subir hasta el torreón de La Atalaya y descubrir sus inigualables vistas sobre el río.
- Talud erosivo en las terrazas de «la Bomba». Bajo las gravas, arenas y limos fluviales, depositadas sobre los yesos impermeables, aparecen manantiales.
- Barranco de la Virgen y ruinas del antiguo poblado fortificado de Castellar. Los restos del castillo coronan el escarpe.
- La Atalaya de Sobradiel, torre vigía medieval. La aridez del escarpe sobre el que se yergue contrasta con el exuberante soto de la orilla contraria.
- Barca de paso de Sobradiel, en servicio para la finca de Candespina. El galacho de la margen derecha constituye un estupendo observatorio de aves.
Practica el turismo fluvial…
En Alagón
En pontón o desde la orilla se pescaba con mangas, tresmallos, esparveles… Cuando la cosecha era mala, la pesca era importante en la dieta. «El rincón del pescador» rinde homenaje a esta ancestral cultura ribereña.
En el río
El Barranco de la Virgen merece sin duda una visita. Seguro que descubres alguna de las razones que favorecieron la existencia de sucesivos asentamientos humanos en la zona. tienes más información en el panel de la Codera.
En Sobradiel
La antigua barca de paso de madera fue sustituida por una metálica, y el fatigoso tiro de sirga por un sistema a motor. Pero el paso de la barca sigue siendo evocador, y en época de cosecha su trasiego es casi constante.